¿Sabías que si no cambiar tu colchón puede provocar muchos problemas con tu salud desde dolores en espalda hasta alergías graves que puede causar el polvo acumulado en tu colchón? ¿Te has preguntado alguna vez cuánto dura un colchón? La vida útil de un colchón puede variar según el tipo de material empleado en la fabricación de la pieza y, cómo no, de la calidad y la proporción de este.
Es por eso por lo que, sabedores de lo ligado que está el uso de un colchón en condiciones y la salud, hemos querido responder a todas las preguntas relacionadas con la durabilidad de los colchones. Así que no importa de qué tipo sea tu colchón, a lo largo de las siguientes líneas te explicaremos cuándo es el momento para reemplazarlo.
Tal y como suelen repetir en sus libros y conferencias los expertos en sueño, se aconseja cambiar el colchón aproximadamente cada 7 a 10 años. Eso sí, esta cifra puede variar ostensiblemente dependiendo del tipo de colchón, la calidad de los materiales y el uso y cuidado que se le haya dado a la pieza. Es importante recordar que algunos colchones de alta calidad, como los de látex natural o ciertos modelos viscoelásticos, pueden llegar a durar hasta 15 años si se cuidan adecuadamente.
Dicho esto, es fundamental prestar atención a las señales de desgaste y comodidad para poder determinar con exactitud cuándo ha llegado el momento de reemplazar el colchón Fuente confiable Cómo deshacerse de un colchón antiguo | OCU Dónde se pueden tirar los colchones cuando queremos deshacernos de ellos. En OCU te proponemos donarlo, pedir que te lo recojan a domicilio o dárselo a una ONG. Todo menos abandonarlo www.ocu.org y comprar uno nuevo. Y es que, por muy bueno que sea tu colchón premium, será incapaz de brindarte noches de sueño largas y reparadoras si su periodo de vida útil ha expirado.
Mantener un colchón en uso más allá de su vida útil puede generar diversos problemas que afectan la calidad del sueño y la salud en general que se pueden agravar de no cambiarse el colchón. A continuación te indicamos algunos de los principales inconvenientes que pueden aparecer si no cambias tu colchón, una vez haya llegado el momento de jubilarlo:
Un colchón desgastado y deformado ya no proporciona el soporte adecuado para la columna vertebral, lo que puede provocar malas posturas durante el sueño y, como resultado, dolores de espalda e incluso
úlceras de presión
Fuente confiable
Resources for prevention and treatment of pressure ulcers: the situation
in Andalusia (Spain)
Cuantificar la disponibilidad de medios materiales de prevención y tratamiento de úlceras por presión (UPP) utilizados en la práctica profesional enfermera en los centros sanitarios y sociosanitarios andaluces.
scielo.isciii.es
. Un colchón con unos estándares mínimos de calidad en buen estado debe ser capaz de mantener una alineación correcta de la columna vertebral y distribuir el peso del cuerpo de manera uniforme para prevenir la aparición de estos problemas.
Dormir en un colchón viejo, desgastado o inadecuado puede llegar a generar tensión en los músculos del cuello y la cabeza, lo que a su vez puede provocar dolores de cabeza y de cuello, como tortícolis. En contraposición, un colchón que se encuentra en buenas condiciones debe proporcionar un soporte adecuado para la cabeza y el cuello, permitiendo una posición cómoda y saludable durante las horas de sueño.
Un colchón incómodo o desgastado tiene grandes probabilidades de dificultar la conciliación del sueño y su mantenimiento durante toda la noche. Y es que está demostrado que un colchón en mal estado, además de incomodidad, puede desembocar en insomnios y en la calidad del sueño. Un asunto no menor, puesto que una mala calidad de sueño puede desencadenar diferentes problemas de salud a largo plazo de distinta consideración como, por ejemplo, fatiga crónica, estrés y disminución del rendimiento cognitivo.
Los colchones viejos tienden a acumular ácaros del polvo, moho y otros alérgenos a lo largo del tiempo. Una serie de sustancias que pueden provocar reacciones alérgicas, como estornudos, congestión nasal, picazón en los ojos y dificultad para respirar. Cambiar el colchón de manera regular y mantenerlo limpio y protegido con un buen, cubrecolchón antialérgico reducirá exponencialmente la exposición a estos alérgenos y, por tanto, contribuirá a mejorar la calidad del sueño y la salud en general.
Como hemos comentado al inicio de esta guía, cada tipo de colchón ofrece unas características, especificaciones y durabilidad distintas, por lo que dependiendo del tipo de colchón que compremos, de acuerdo a nuestros gustos, necesidades y posibilidades económicas, disfrutaremos de un periodo de vida útil distinto.
Dicho esto, el tipo de colchón que, por lo general, dura más es el colchón de látex. Sobre todo si este está hecho de látex natural 100%. Y es que, estos, debido a sus especificidades únicas, disfrutan de una vida útil de entre 10 y 15 años. Un periodo que se puede prolongar sensiblemente, dependiendo del uso y de los cuidados que se le den a la pieza.
Esto se debe a que los colchones de látex son resistentes al desgaste y tienen una buena capacidad de recuperación, lo que les permite mantener su forma y soporte a lo largo del tiempo. Además, el látex natural es resistente a los ácaros del polvo y a la proliferación de moho y bacterias, lo que contribuye a su durabilidad sin merma de sus propiedades con el paso de los años.
En este punto es clave destacar que la vida útil de un colchón también variará considerablemente en función de factores clave como la calidad de los materiales, el uso y los cuidados que se le den a la pieza.
A continuación os detallamos el periodo de vida útil medio de cada uno de los principales tipos de colchones a la venta en la actualidad:
Como acabamos de indicar, los colchones de látex suelen tener una vida útil de entre 10 y 15 años. Los colchones de látex natural son más duraderos que los de látex sintético, aunque ambos ofrecen un buen rendimiento a lo largo del tiempo.
Los colchones de latex son una excelente opción para quienes quieren comprar un colchón que les dure durante el mayor tiempo posible porque se consideran como los más duraderos.
Los colchones viscoelásticos, también conocidos como colchones de espuma con memoria o con memory foam, tienen una vida útil promedio de 7 a 10 años. La densidad y la calidad de la espuma viscoelástica son los dos aspectos que más influirán en su durabilidad. El periodo de vida útil de los mejores colchones viscoelásticos supera con creces la década de vida. Un claro ejemplo de ello es el TEMPUR Easy. Lo mismo sucede con las almohadas viscoelásticas. Por cierto, si aún no tienes una almohada así de confortable pero te gustaría comprarte una, puedes echar un vistazo a nuestro otro artículo sobre las mejores almohadas viscoelásticas.
Los colchones de muelles, también llamados colchones de muelles ensacados, suelen durar entre 7 y 10 años. La calidad y cantidad de los muelles, así como el soporte perimetral, son los tres capítulos que más influyen en su vida útil. De ahí que sea tan importante revisar la ficha técnica de la pieza antes de comprarla.
Por su parte, los colchones de espuma, como les sucede a los de poliuretano, tienen una vida útil de 5 a 7 años en promedio. Un periodo inferior al del resto de colchones populares. La durabilidad de estos dependerá, en gran medida, de la densidad y calidad de la espuma utilizada.
Un colchón híbrido o, lo que es lo mismo, una pieza que combina capas de espuma con un sistema de muelles ensacados, por lo general tiene una vida útil de 7 a 10 años. Una vez más, la duración del colchón híbrido variará en función de la calidad de los materiales utilizados y del cuidado que se le dé a la pieza. Algunos colchones híbridos de alta calidad pueden durar en perfectas condiciones más allá de la década si se mantienen y cuidan adecuadamente. Un buen ejemplo de colchón híbrido de calidad con una gran durabilidad es el Linenspa Colchón híbrido.
Para prolongar la vida útil de tu colchón y mantenerlo en perfecto estado durante su periodo de vida útil, sigue los siguientes consejos:
Por aqui también te dejamos un vídeo de cómo puedes limpiar tu colchón para prolongar su vida útil
Si sigues todos estos tips podrás prolongar la vida útil de tu colchón y, lo que es más importante de todo, disfrutar de un sueño cómodo y reparador durante mucho más tiempo.
Si algo ha quedado claro a lo largo de esta guía sobre cuánto dura un colchón es que no existe una respuesta única, puesto que su durabilidad varía enormemente según el tipo, la calidad de los materiales y el cuidado que se le dé.
También que, por lo general, un colchón debe durar entre 7 y 10 años (aunque algunos, como los de látex natural, pueden durar hasta 15 años si se cuidan adecuadamente) o que es fundamental prestar atención a las señales de desgaste y comodidad para determinar cuándo es necesario reemplazar tu colchón y así garantizar un descanso óptimo y mantener una buena salud.
